AMISTAD

Quien quiera buscar la definición de esta palabra en el diccionario, es libre de hacerlo. Pero he de advertir que esa definición se queda muy corta. Esta palabra llega mucho más lejos. Yo la he buscado en muchos diccionarios y no me acaba de convencer ninguno.

Olvidándome de esas pequeñas definiciones, la amistad es algo así:

Es un sentimiento de alegría, un sentimiento que expresa complicidad, es un sentimiento compartido por dos o más personas. Es un sentimiento de especial fuerza. Tanta, que consigue generar acciones: un gesto, un guiño, un saludo, un golpe, un abrazo, un beso, una sonrisa... Es por eso por lo que es vital en la vida de las personas. 

La amistad, para poder recibirla, también hay que aportarla. Así conseguimos crear una relación, una experiencia  nueva con otra persona: un amigo. Y es que amigos hay de muchos tipos: el gracioso, el guapo, el inteligente, el anormal, el raro, el alma de las fiestas, el sensible, el nervioso, el snob, el mala leche... 

Sin embargo, siempre hay uno que lo tiene todo, ese es el más común: el Mejor Amigo. Cada persona tiene un concepto diferente del Mejor Amigo. No todo el mundo busca lo mismo en una persona. Yo, por ejemplo, busco la sencillez. Me encanta ir con mi Mejor Amiga por la calle hacia mi casa y que me diga "tengo hambre" y yo la conteste "ya estamos llegando", lleguemos a mi casa y antes de quitarse la chaqueta o simplemente ponerse cómoda, entra en la cocina y abre la nevera. A muchos les puede parecer una completa falta de respeto, a mí me parece una completa demostración de confianza. Porque la confianza y la amistad van juntas.

Es algo muy difícil de explicar, pero, en definitiva, la amistad es uno de los placeres más bonitos de este mundo.